Dicen que la ética es el estudio de la moral, determinando como deben actuar los individuos de una sociedad. Si miramos en el diccionario que es "sociedad", nos dice que es una agrupación natural o pactada de personas, que constituyen una unidad distinta de cada uno de sus individuos, con el fin de cumplir, mediante la mutua cooperación, todos o alguno de los fines de la vida".
Podríamos deducir entonces que un comportamiento ético consiste en la mutua cooperación para cumplir un fin de la vida. Desde garantizar su reproducción hasta su protección y conservación. Por lo tanto, recortar en Sanidad no es un comportamiento ético. Tampoco el salvaje aumento de la factura de la luz, precio del gas natural y del petróleo, gracias a la gestión de nuestros últimos tres presidentes del gobierno que en "aras a la competitividad y al uso de energías renovables" han logrado que muchos hogares no puedan utilizar la calefacción todo lo que debieran.
Menos ético que nada es robar, y aún encima tener la desfachatez de defenderse delante de las cámaras en vez de dimitir y defenderse ante un tribunal. Pero hay muchas formas de robar: a la clásica de sustraer lo ajeno -y la agravada cuando lo ajeno es de todos- esta la más sutil, de robar a tus empleados; que es básicamente cuando el empresario es de los más ricos del mundo, y donde vive, de las zonas más pobres de Europa.
Robar también es la empresa en "b", la cual tranquilamente roba 5000 euros al año, como poco. Están los ladrones "nacionalistas", aquellos que con la excusa de una identidad étnica, lingüistica y/o histórica, tienen o pretenden sus propios jueces, policía y gobierno, con el ánimo exclusivo de robar, evadir y subvencionar a sus amigos.
También están los ladrones de guante blanco, aquellos que primero ganan 400.000 euros en un año -lo que no gana mucha gente en su vida- y después constituyen una sociedad para pagar un 30% de Sociedades en vez de un 55% de IRPF.
Los últimos, que no menos importantes, son aquellos que presumen de hispanidad cuando ganan en un deporte pero que curiosamente, fingen vivir en algún paraíso fiscal cuando toca pagar impuestos. Si esa gente fuera consecuente y ética, Mónaco, Liechestein e Islas Caimán, ganarían más titulos mundiales y medallas de oro que los mismísimos EEUU en cinco años.
¿Se imaginan todos esos políticos, empresarios y deportistas si pagasen lo que tenemos que pagar todos, dónde estaríamos? Pues estaríamos en Holanda, Noruega o Suecia y fuera de la crísis, ni más ni menos. Países donde la ética esta por encima de todo, porque saben que supone el bien común. Son conscientes de que cuando no pagas un impuesto o cobras el paro a la vez que trabajas, robas el paro a tu vecino y dejas sin comedor escolar a un menor y sin vacunas al mayor. Por eso, allí, a los que roban, los marginan y acorralan, y los señalan con el dedo. No se les ocurre hacerlos dimitir de la política para darles un puestazo en una empresa privada y que se callen la boca, ni mucho menos entrevistarlos en "prime time" o mantenerlos en un cargo público o partido político con la condena a las puertas. Y si eres deportista, te quitan el patrocinio. Nadie quiere verse asociado a un ladrón por esas latitudes. Por eso creo que la ética en España debería darse antes que el abecedario.
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